Azúcar. Todos escuchamos lo malo que es y cómo los riesgos de padecer diabetes están a la vuelta de la esquina. Parece haber mucha información, mucha desinformación y mucha gente luchando con ella.
El azúcar añadido está en todas partes y en todo. Es fácil no saber qué hacer al respecto. Aquí te damos tres pasos que te ayudarán a reducir el azúcar y volver a tener una vida saludable.
TENGA EN CUENTA LO QUE LE HACE EL AZÚCAR
Tendemos a pensar en el azúcar como un peligro cuando se consume en exceso y durante un período prolongado. Pero, ¿cuánta azúcar es mala? ¿Cuánto tiempo se tarda?
Es fundamental comprender que cada grano de azúcar hace que su cuerpo reaccione y afecte su funcionamiento. Sí, su cuerpo puede tolerar el azúcar, pero en determinadas condiciones y cantidades. Veamos qué le hace a nuestro cuerpo.
Cuando comes azúcar, entra en tu torrente sanguíneo y nuestros niveles de azúcar en sangre aumentan. Si está corriendo, por ejemplo, el azúcar se usaría como combustible y se quemaría rápidamente. La mayoría de las veces, sin embargo, no lo somos. Para bajarlo a niveles normales, su cuerpo libera insulina.
La insulina intentará almacenar el exceso de azúcar y, cuando los músculos estén llenos, los convertirá en grasa. Cuando este proceso se repite una y otra vez, sus células se vuelven resistentes a la insulina. Esto significa que su cuerpo producirá más y más insulina, aumentando la resistencia a la insulina y también almacenando más y más grasa. Así es como se desarrolla la diabetes.
El azúcar también afecta su cerebro y su comportamiento. Es bastante común que la gente hable sobre los niveles altos de azúcar. Esto también afecta su capacidad de concentración y la de sus hijos.
USTED TIENE EL CONTROL DE SUS ACCIONES
Los azúcares están presentes de forma natural en muchos alimentos. Esto esta bien. Es el azúcar añadido de lo que debemos preocuparnos. Como todo en la vida, es una lección que aprender. Le llevará algún tiempo hacer la transición. No te preocupes.
Lo importante es actuar cada vez que pueda, sin mentirse a sí mismo. Los antojos no son más fuertes que tú. Tampoco lo es la “adicción” al azúcar. No dejes que estos conceptos abstractos te quiten el poder. Usted toma una decisión, cada vez: comer o no comer azúcar agregada.
VIVE UNA ELECCIÓN A LA VEZ
No veas esto como una lucha de por vida. Concéntrese en la elección que tiene frente a usted. Se volverán más fáciles.
Deja los refrescos. Olvídate de Coca-Cola, Gatorade o incluso Frappés. Hidrata tu cuerpo con agua y unas gotas de limón (natural) o pepino. ¡Esto le ayudará a reponer los minerales que podría haber perdido y sin azúcar!
No guarde bocadillos y alimentos azucarados cerca. La tentación no es tu amiga. Tenga a mano otros bocadillos, como frutas y nueces. ¡Poco a poco dejará de desear el azúcar y comenzará a esperar esos bocadillos saludables!
No, repito, NO se recompense con azúcar. Si eres bueno durante 6 días y tienes un pastel enorme el séptimo día, te estás diciendo a ti mismo que el azúcar es un premio que ganas por no comer azúcar. Es contradictorio y no te ayudará de ninguna manera. La recompensa debe ser cómo te sientes, cómo te ves, tus niveles de energía y, sobre todo, ¡tu salud!
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