El hígado graso es la etapa temprana y la alarma de la enfermedad hepática que viene. Nuestro hígado trabaja continuamente para eliminar todos los desechos y toxinas de tu cuerpo que acumulas todo el día. Si no se cura el hígado graso a tiempo, puede ocasionar enfermedades graves como la cirrosis y el cáncer de hígado.
En el hígado graso, el hígado deja de producir células y comienza a producir tejido cicatricial que se llama fibrosis. Esta fibrosis causa un bloqueo grave en la circulación sanguínea del hígado y también afecta el movimiento del bazo, lo que hace que las células hepáticas en sus paredes se dañen y comiencen a alterar la función hepática y la reacción química.
Tu hígado también regula los niveles de proteínas, grasas y azúcar en tu torrente sanguíneo.
El hígado graso puede ser inducido o no por el alcohol. Cuando el hígado está sobrecargado con toxinas como el alcohol o la grasa, se puede dañar mucho más rápido y es incapaz de convertir la grasa en energía. La cantidad excesiva de hierro en nuestro cuerpo, un peso pesado o las grasas son los más perjudiciales para el hígado.
Consumir muchos alimentos proteínicos, colesterol y alto nivel de ácido úrico puede causar hígado graso y luego cirrosis. La enfermedad hepática es la única causa principal de muerte que sigue aumentando en el Reino Unido.
Causas Más Comunes de La Enfermedad Hepática
El alcohol y la obesidad son las causas más comunes de enfermedad hepática. El riesgo de desarrollar daño hepático alcohólico varía de persona a persona, pero está directamente relacionado con la cantidad de alcohol consumido.
Las mujeres son más propensas a desarrollar la enfermedad del hígado graso alcohólico que los hombres con adicción al alcohol. Se requiere de cinco años de consumo constante para producir hígado graso. La dieta no saludable y el peso corporal excesivo pueden dañar tu hígado muy rápido.
Síntomas del Hígado Graso
- Debilidad y músculos débiles
- Pérdida de apetito
- Insomnio
- Pérdida repentina de peso corporal
- Hinchazón y dolor en la parte superior del abdomen
- Escasos periodos
- Agrandamiento de mamas en hombres con dolor y pérdida de libido
- Bazo agrandado
- Ácido úrico
- Hemorroides
- Hinchazón de pies e infecciones
El hígado graso, por su propia naturaleza, es difícil de tratar. Además de evitar la causa, el tratamiento es principalmente dietético. Elige una dieta que le dé al hígado restante el menor trabajo posible.
Aquí también te sugerimos algunos jugos para limpiar el higado graso que puedes comenzar a tomar desde hoy.
Receta # 1:
1 Manzana
1 Remolacha
5 Hojas grandes de col rizada
2 Puñados de espinacas
5 Hojas grandes de col rizada
1/2 Limón (Más si disfrutas el sabor)
1 Diente de ajo
1/2 Aguacate
Bebe este jugo de limpieza del hígado una vez al día.
Receta #2:
4 Tallos de apio.
½ Limón
½ Pulgada de raíz de jengibre.
3 Zanahorias medianas o 1 raíz grande de remolacha roja. Alternar entre la remolacha y las zanahorias es una gran manera de mantener un buen sabor y proporcionar diferentes nutrientes a tu cuerpo.
La remolacha puede ser una mejor opción antes de tu entrenamiento. Según la investigación, beber remolacha puede ayudar a mejorar el ejercicio relacionado con la resistencia.
Instrucciones:
Haz jugo todos los ingredientes.
Bebe inmediatamente.
Este jugo de limpieza hepática debe consumirse con el estómago vacío al menos 2 horas antes o después de las comidas.
Receta #3 Remolacha Para Limpiar El Hígado Graso
2 Remolachas orgánicas medianas
2 Tazas de arándanos orgánicos
2 Zanahorias orgánicas grandes
1 Manzana grande
1 Taza de agua pura de coco
Pieza de 2 pulgadas de ajo orgánico fresco
½ Taza de brócoli orgánico crudo
1 Limón entero
Pica el jengibre, la remolacha, la manzana, la zanahoria y el limón en cubos de 1 pulgada. Exprímelos, alternando con puñados de arándanos. A mitad agrega la mitad del agua de coco. Continúa haciendo jugo hasta que tengas un total de 4 tazas de jugo. Puedes agregar hielo si lo deseas o dejar a temperatura ambiente, pero, de cualquier manera, bebe de inmediato o en unas pocas horas como máximo.
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