Antes de buscar tratamientos para esta condición es esencial que conozcas un poco sobre qué es exactamente y cómo identificarla. La dermatitis atópica es uno de los tipos de eczema más comunes y aunque ocurre con mayor frecuencia en niños y jóvenes, puede atacar a cualquier edad. Los síntomas de esta condición son los siguientes:
- puntos rojos,
- piel inflamada
- picazón constante
- residuo líquido
Está claro que causa un gran malestar y si no se trata correctamente, puede afectarte en todos los aspectos de tu vida. Es por eso que este sitio se creó, para que puedas obtener un descanso de esta condición.
Si tan común es, ¿porqué no existe una cura definitiva? Pues la ciencia aún no ha confirmado la causa decisiva de esta condición, por lo tanto encontrar una cura no ha sido fácil. Hay bastante evidencia para sugerir que resulta de una reacción interna hacia la combinación del ambiente, la genética y áreas debilitadas de la piel.
Para conocer más sobre las posibles causas de la dermatitis atópica y su respectivo tratamiento, siga leyendo. Más adelante se expondrán las terapias que te puedan ayudar para tratar tu condición.
Alérgenos y Desencadenantes Ambientales
Éstos pueden ser difíciles de controlar como forma de tratar la dermatitis atópica. Existen demasiados factores que pueden producir una reacción en tu piel y que son difíciles de tener bajo control. Algunos desencadenantes ambientales como pelo de mascota, químicos para la limpieza y ácaros pueden ser controlados mas nunca evitados completamente.
Otro ejemplo es el humo, que en muchos casos es un desencadenante para la dermatitis atópica facial. El humo puede ser evitado pero es frecuente ser expuesto a él en cualquier momento.
Los alérgenos en la comida tampoco se pueden controlar fácilmente. Cada persona tiene una tolerancia única hacia la comida, por ejemplo, tu puedes reaccionar con la lactosa y otra persona con la comida picante.
Algunas personas son sensibles a los niveles de PH en la comida, lo cual es aún más complicada para controlar. Tendrás que consultar con un experto o especialista para identificar tus reacciones personales con la comida y obtener algunas recomendaciones. Debes intentar una dieta que ayuda a prevenir el eczema pero esto no siempre será posible. Comer en un restaurante o en casa de amigos significa que los ingredientes serán desconocidos.
Los productos para la piel incluyendo el maquillaje son tratados con bastante sospecha como desencadenantes de alérgenos. Elementos en cremas, lociones, maquillaje y esmaltes siempre son lo primero en la lista de causas en cuanto a la dermatitis atópica.
Existen marcas hipoalergénicas que poseen menos probabilidad de contener alérgenos. Marcas orgánicas que disponen de ingredientes naturales que no tapan tus poros son una muy buena opción si sufres de brotes. No debas frenar por completo tu uso de productos de belleza, ya que la idea no es ésa. Simplemente busque productos con ausencia de elementos alérgenos. ¡No tienes que comprometer tu belleza!
Terapia Estándar
Buscar un tratamiento en el cual puedes confiar es un trabajo arduo pero no imposible. Es obvio que no puedes evitar por completo los elementos existentes en todo lo que te rodea, pero si hay formas para tratar tus reacciones.
Los tratamientos estándar simplemente son los más aceptados en el campo de la medicina e incluyen cremas tópicas (que contienen esteroides), terapia con luz ultravioleta y varias prescripciones. Otros tratamientos de mayor complejidad requieren el ingreso al hospital o clínica pero sólo tienes que preocuparte por esto si sufres de brotes severos.
¿Qué tan efectivos son estos tratamientos ‘estándar’? Pues es verdad que son efectivos hasta cierto punto pero como todo, tiene sus desventajas.
Lo primero, la inversión que se debe hacer para hacer uso de los medicamentos es grande, por lo que para esta condición se necesita de un tratamiento que se extiende sobre un largo periodo de tiempo, dada su naturaleza recurrente. Consultar con tu presupuesto es algo inevitable.
Otro factor desventajoso consiste ya en la aplicación y el uso de los medicamentos. Se recomienda usar tratamientos naturales para complementar la prescripción de tu médico ya que algunos medicamentes pueden afectar las zonas más delicadas como tu cara y párpados.
Siempre es importante consultar primero con tu médico para obtener una opinión profesional y recomendaciones adicionales.
Terapia Complementaria
¿En qué consiste? Pues este tipo de terapia es la que se considera no-convencional y que complementa los tratamientos médicos estándar. Si te estás preguntando qué efecto puede tener sobre ti, básicamente se trata de agilizar el tiempo de curación, mejorar el proceso de recuperación y actuar como calmante natural recurriendo a la relajación.
Cualquier terapia que te ayuda a relajar puede servir para prevenir el esparcimiento de toxinas dentro de tu cuerpo como productos de estrés. Muchas personas creen que los brotes pueden aparecer en periodos de estrés, más que al poco tiempo de estar expuesto a un alérgeno. La clave entonces es mantener el cuerpo en un estado de relajación para prevenir los brotes.
A continuación se exponen algunos tipos de terapia complementaria:
- Masajes: Como ya se dijo anteriormente, combatir el estrés es una de las formas para luchar contra la dermatitis atópica. Someterse a sesiones regulares de masajes es una buena opción para lograr la relajación y la calma.
- Acupuntura: Es otra forma de relajación que hasta puede ser más efectiva que los masajes, ya que puede ser aplicado tanto sobre piel normal como afectada.
- Medicina herbaria occidental: La técnica usada se deriva de las plantas para la curación, haciendo uso de raíces y hierbas para combatir los brotes. Raíces de roble blanco y olmo son comunes en estos tratamientos.
- Extractos: Estos constituyen un tratamiento popular para calmar la piel y agilizar el proceso de curación. Se usan extractos así como el aceite de oliva y de smillas de cáñamo entre otros.
Es importante estar consciente de que la terapia complementaria no significa el reemplazo de la terapia estándar, sino que trabaja en la función de ésta y volviéndola más efectiva. Debes investigar para encontrar el tratamiento que más te beneficia.
Consejos Sobre Terapias
Como para cualquier tratamiento al que te sometes, es preciso estar seguro de la dosis y sobre todo saber si los métodos hayan sido probados anteriormente. Esto se aplica tanto para las terapias estándar como para las terapias complementarias.
Las consecuencias de usar un método comprobado o una dosis incorrecta pueden perjudicar tu salud aún más e incluso empeorar el estado de tu dermatitis atópica.
Es imprescindible buscar la opinión de un experto que esté especializado en el cuidado de la piel y la curación natural. También es importante consultar con alguien que conozca tanto de terapias estándar como terapias complementarias para darte un tratamiento efectivo.
¿Qué tipo de recomendaciones debes buscar? Tener conocimiento acerca de medicinas herbales, técnicas de relajación, nutrición y otras terapias es fundamental, así que el experto que te proporcione este tipo de datos es ideal.
Hay otra fuente de información, un e-libro titulado Adiós Eczema que ha sido escrito por un especialista que además ha sufrido de dermatitis atópica severa durante la mayor parte de su vida. Con el libro él pretende dar a conocer tratamientos efectivos y brindar una colección de recomendaciones con el objetivo de ofrecer un alivio para otros.
Deja una respuesta